Vuelve el circo, se abre de nuevo la pista central de la política catalana, comienza otra legislatura autonómica en Cataluña. La comedia está servida.
El úl!@#*! pleno, allá por octubre, fue el de la república vista y no vista, la del voto secreto. Insuperable espectáculo, cuya traca final fue la disolución de la cámara por el 155. Será difícil superar el listón, pero los golpistas se han juramentado para que no decaiga la fiesta..