Extremadura tiene tres veces más funcionarios que Catalunya
La Generalitat es la administración que tiene menos empleados por habitante Joan Maria Piqué | jmpique@diaridetarragona.com
Catalunya es la comunidad que tiene menos funcionarios de todas las administraciones, según datos del ministerio de Administraciones Públicas recopilados por el Departament de Governació a los que ha tenido acceso el Diari. La Generalitat también es la administración autonómica que cuenta con menos empleados públicos en relación a su población.
Los datos del ministerio de Administraciones Públicas desmontan la tesis de que la Generalitat es un monstruo burocrático, al menos en comparación con el resto de administraciones autonómicas. Sobre una población de siete millones de habitantes, de los que se consideran población activa de 3,4 millones, el número de empleados públicos del Govern asciende a 133.450, lo que equivale a 19,11 funcionarios por cada mil habitantes, o a un porcentaje del 3,86 por ciento de la población activa que forma parte de la plantilla de la Generalitat.
La comunidad extremeña, cuyo presidente Juan Carlos Rodríguez Ibarra critica con frecuencia lo que entiende por uso ineficiente de los recursos públicos catalanes, ofrece unos datos muy distintos. con un millón de habitantes y una población activa de 454.000 personas, un 9,72 de las personas que trabajan en Extremadura lo hace para la administración autonómica que preside Ibarra. Es decir, casi diez de cada cien trabajadores, lo que equivale a 40,87 funcionarios por cada mil habitantes
Funcionarios estatales y locales
Los empleados de las otras administraciones no mejoran las ratios de los servicios públicos en Catalunya. En total, el país cuenta con 259.969 personas que desempeñan en las diferentes administraciones. Esto equivale a 37,22 empleados públicos por cada 1.000 habitantes, es decir, un 7,53 por ciento de la población activa. Por seguir con la misma comparación, Extremadura cuenta con 86,374 funcionarios, es decir, 79,92 por cada millar de habitantes. Esto supone un 19,01 por ciento de la población activa, o sea, de cada 100 personas que trabajan en la comunidad extremeña, 19 lo hacen para las diferentes administraciones.
La directora general de la Funció Pública, Rut Carandell, estimó que Catalunya tiene una administración público infradotada, y recordó que la Generalitat ejerce competencias que otras comunidades no tienen, como la policía o las prisiones. Carandell señaló que de los 135.000 empleados que trabajan para el Govern, sólo 19.000 se dedican a tareas burocráticas, y el resto prestan servicios públicos directos, como la sanidad o la educación.
Rut Carandell apuntó que aunque al cuerpo de servidores públicos se sumara el personal que trabaja en servicios concertados, que fundamentalmente intervienen en la educación y la sanidad, el porcentaje de empleados públicos comparado con la población activa pasaría del 7,53 por ciento al 9,84 por ciento, con lo que Catalunya se mantendría igualmente en la cola de las comunidades en número de trabajadores públicos.
Para valorar estos datos hay que tener en cuenta que Catalunya inició antes su autogobierno, pero ha sido superado en porcentaje de funcionarios por habitante por el resto de comunidades autónomas. Carandell respondió la pregunta de si Catalunya necesita más funcionarios afirmando que la cuestión es si los ciudadanos necesitan más servicios públicos. De los datos se desprende que Catalunya tiene margen para ampliar sus prestaciones, puesto que otras comunidades ya lo hacen, aunque también reconoció que las cifras pueden plantear que algunas administraciones autonómicas están sobredimensionadas.
Las comunidades con una balanza fiscal negativa (es decir, en las que el Estado no invierte en la misma proporción a los impuestos que recauda) presentan un mayor déficit de funcionarios. Balears, con un 9,22 por ciento de población activa dedicado a los funcionarios, o el País Valencià, con un 9,27 por ciento, son también comunidades que figuran en el furgón de cola de la cifra de empleados públicos.
La presencia militar dispara las cifras de la ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, con casi un tercio de su población activa en la nómina pública. El las comunidades forales. Navarra (10,63 por ciento) supera a Euskadi (10,12 por ciento).
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Catalunya es la comunidad con menos funcionarios por persona, y Extremadura, la que tiene más
Los empleados públicos se incrementaron en casi 6.000 durante el último año en Catalunya
http://www.lavanguardia.es/web/20051107/5119703509-1.html
